Elegí “Las mujeres del club Briar” de Kate Quinn para mi club de lectura del mes de julio. Este ha sido mi primer acercamiento a la autora, aunque seguro que a muchas os suenan sus otros libros más populares, como La red de Alice o El código rosa.

Las mujeres del club Briar

El club Briar se crea en una casa muy particular donde conviven varias mujeres, cada una con su propia historia y secretos. La narración se construye en capítulos largos, cada uno dedicado a una inquilina distinta. Por un lado, esto hace que los capítulos sean extensos, pero al mismo tiempo te sumerges en la vida de cada mujer y en los temas de fondo que la autora quiere poner sobre la mesa: feminismo, planificación familiar o segregación racial. Todo entrelazado con el día a día de la casa y con la tensión del contexto histórico que te explico a continuación.

Contexto Histórico

La historia se sitúa en Washington en los años 50, en plena era McCarthy. Durante esa década, el senador Joseph McCarthy y su equipo se hicieron famosos por perseguir a personas del gobierno y del ejército bajo sospecha de ser agentes soviéticos o simpatizantes del comunismo. Fue una etapa marcada por la desconfianza, el miedo y la censura, y todo ese ambiente opresivo se refleja de alguna forma en la novela.

Sinopsis

Todo el mundo guarda las distancias en la Casa Briarwood, una deslucida casa de huéspedes para mujeres donde los secretos se ocultan tras cercas blancas de madera. Todo cambia cuando la encantadora y misteriosa viuda Grace March se muda a la habitación del ático y decide crear lazos de amistad entre su extraña colección de vecinas.

Personajes

Como suele pasar en este tipo de novelas, unas historias me resultaron más interesantes que otras. En el club de lectura coincidimos casi todas en que las mejores fueron las de Nora y Reka. En especial la de Reka me encantó, porque además está ligada a un pintor que me gusta mucho (aunque aquí me reservo los detalles para no hacer spoilers). En cambio, la de Beatrice se me hizo bastante aburrida y me costaba conectar con ella.

Grace es la gran protagonista, el eje que une a todas. Es un personaje misterioso y protector, con un instinto casi maternal hacia las demás. A veces me pareció entrañable, pero en otras ocasiones demasiado metomentodo. Eso sí, tiene un papel clave para que la historia avance y, en definitiva, es la que sostiene el relato.

Trama

Uno de los grandes aciertos del libro son los misterios que rodean la casa. No voy a entrar en detalles para no estropear la lectura, pero puedo decir que hubo momentos en los que no sabía en quién confiar. Eso mantuvo viva la lectura, y también nuestras reuniones del club, porque cada una íbamos cambiando de sospechosos en cada capítulo. Esa sensación de duda constante es lo que hizo que quisiera seguir leyendo.

Aspectos Que No Me Convencieron

El primero, la mezcla de tantos elementos: además de las historias personales y los misterios, aparecen recetas intercaladas e intervenciones de la casa. Sí, en este libro la casa también piensa. En mi caso, las recetas me sobraron un poco y reconozco que las leí en diagonal. Y, por último, el final me dejó algo fría. Después de páginas llenas de tensión, esperaba una resolución más sólida, con pistas que nos hubieran permitido anticipar algo. En cambio, sentí que la conclusión fue forzada.

A pesar de esas cosas, “Las mujeres del Club Briar” me ha parecido una lectura entretenida. Me gustó cómo la autora mezcla las vidas personales con los grandes temas de fondo que marcan la época: el feminismo incipiente, las desigualdades raciales, la presión social sobre la maternidad y la familia, y la sombra constante de la sospecha política durante el macartismo. Todo eso hace que la novela tenga capas de lectura diferentes, más allá del misterio en sí.

Si buscas un libro que combine secretos, amistad y contexto histórico, “Las mujeres del Club Briar” puede ser una lectura muy interesante para ti.

¡Feliz lectura!